La educación financiera nos aporta una nueva visión del dinero y nos ayuda a desarrollar las herramientas necesarias para administrar mejor nuestras finanzas. De esta forma aprenderemos a generar excedentes para alcanzar una libertad financiera. Esto es lo que se conoce como inteligencia financiera.
Aunque la frase suene manida, aquello de que “el dinero no da la felicidad, pero ayuda” es cierto, al menos en parte. Administrar correctamente tus finanzas y tener estabilidad económica sin duda nos brinda una gran tranquilidad. Robert Kiyosaki, autor del libro “Padre Rico, Padre Pobre”, afirma que el dinero es una forma de poder, pero la educación financiera es aún más poderosa que éste. El dinero va y viene, no obstante, si posees los conocimientos necesarios sobre su funcionamiento, podrás empezar a generar riqueza.
Los pilares básicos de la inteligencia financiera
Todos deseamos alcanzar aquella libertad financiera que nos permita disfrutar de la vida sin imprevistos o el miedo de no poder llegar a fin de mes. Es por esto que decidimos trabajar 8 horas diarias y esperamos ansiosos al ingreso de la nómina. Vivimos pensando que, si ganásemos más dinero, se acabarían todos nuestros problemas financieros; sin embargo, una vez que nos aumentan el sueldo estos problemas continúan.
Entonces, ¿cuáles son las claves para lograr ese ansiado colchón de dinero que nos permita vivir en calma? La inteligencia financiera puede darnos algunas claves y se fundamenta en los siguientes cuatro pilares:
-
Admite la importancia del dinero:
Es esencial que entendamos el valor que tiene el dinero y cuánto cuesta conseguirlo. De esta forma evitaremos malgastarlo y pondremos más esfuerzo en gestionarlo de una forma eficiente.
Una de las formas de concienciarse del valor del dinero es comparar el coste de un producto con las horas que tendrías que trabajar para pagarlo. Esto te permitirá evitar comportamientos compulsivos al discernir qué desembolsos merecen realmente la pena y cuáles son simplemente caprichos.
-
Aprende a organizar tus cuentas:
Una de las mejores maneras para saber cuánto puedes ahorrar y cuánto puedes gastar por mes es haciendo un registro de tus ingresos y tus gastos mensuales. De esta forma conseguiremos tener una visión global sobre el dinero que entra y sale de nuestra cuenta y nos ayudará a gestionar de mejor manera nuestras finanzas.
Hay muchas fórmulas para ahorrar dinero mes a mes, pero el primer paso siempre será la elaboración de un presupuesto.
-
Evita la deuda mala:
Es muy complicado que puedas costear un coche o una casa con tus ahorros y, por lo tanto, es probable que en estos casos acudas a un crédito. No obstante, a veces pedimos dinero prestado para bienes de consumo que no necesitamos realmente y, si no tenemos cuidado, esta práctica puede dar lugar a un sobreendeudamiento. En resumen, cuando se trata de determinados productos, piensa que si no puedes pagarlo, quizás no debas comprarlo.
-
Haz que tu dinero trabaje:
El último de los pilares de la inteligencia financiera es poner a trabajar nuestro dinero, o lo que es lo mismo, invertir y buscar maneras de conseguir ingresos pasivos que nos permitan obtener más dinero sin tener que buscar un trabajo extra. Lo más importante en este punto es cambiar nuestra percepción de los ahorros, y es que, si simplemente acumulamos dinero, la inflación jugará en nuestra contra y cada vez tendremos menos, incluso si no lo tocamos.
La mayoría de las personas no entienden que la clave no está en cuánto dinero ganas, sino en cuánto dinero consigues guardar y cómo manejas ese sobrante. Seguramente habrás oído historias de personas que ganaron la lotería y al poco tiempo se arruinaron. Esto se debe a que no fueron capaces de gestionar su dinero haciendo uso de la inteligencia financiera.
Si quieres saber más sobre cómo organizar tus finanzas para conseguir estabilidad económica y libertad financiera, no te pierdas los cursos de Simple Finance, el aula virtual de Santander Consumer Finance.